Un azucarero cómodo con cuchara, equipado con una tapa que se puede abrir y cerrar con una mano. Perfectamente adecuado no solo para azúcar, sino también para servir mermeladas o una variedad de condimentos u otros productos específicos, por ejemplo, para queso rallado. Fácil de desmontar y adecuado para lavar en un lavavajillas.

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